Yo amo a los extraños, de hecho vivo con 3 entes a los que apenas conozco y menos me conocen, 2 de ellos son los responsables de que viniera a este mundo, el otro es el mejor candidato a donarme un riñón; ellos siempre están esperando por mí, pero jamás tienen algo importante que compartir conmigo, vivimos bajo el mismo techo, pero no compartimos sueños, pensamientos, ideas, hay días que ni compartimos la mesa, mucho menos el control de la tv, en esta casa solo se habla de temas que a ellos les interesan como discutir mis horas de llegada, si así como si tuviera 15 años y no tuviera idea de cómo es el mundo y siempre se terminan esas platicas con un: “la puerta es muy ancha, puedes irte cuando quieras, aquí no estás a huevo” o peor aun con un: “así debieras ser buena para mantenerte, ni siquiera te alcanza para cubrir tus gastos y eso que aquí todo se te da”, así que no me culpen por amar a los desconocidos de la mera neta, si esos que van por la vida y no les sabes el nombre ni la historia, ni te importa su presente o su futuro, para mí esa es la gloria estar al lado de un perfecto extraño que no está esperando absolutamente nada de mí, y que “dios” sabe que no espero absolutamente nada de el, ni bueno ni malo, bueno espero que no sea un cabrón ratero, y también espero que se vaya a la chingada para ya no olerlo, y que deje de estar husmeando en mi escote, y tal vez incluso poder acostarme cómodamente en el asiento, lo que importa es que ni debo sentirme culpable por desear que el desconocido desaparezca, ni el desconocido está esperando algo de mí, o tal vez esté esperando lo mismo que yo espero de él, que deje el asiento libre para que si se sube al camión una chava con mejor escote que el mío se pueda sentar a su lado, lo que me agrada de el desconocido es que él no tiene ninguna expectativa sobre mi futuro, no planea sentirse orgulloso, a ese wey le importan un carajo, mi “buen nombre” y mi apellido, o si elegí una carrera mediocre, lo más seguro es que ese cabrón ni sepa que significa mi carrera, digo si en mi familia hay “ingenieros” que no saben lo que es diseño industrial, que puedo yo esperar de un albañil, ese wey no sabe que probablemente su sueldo es más alto que el mío; si, un albañil debe ganar más que yo –mi sueldo da risa, por eso no me toman en serio en mi casa – como sea ese wey no sabe que con todo y que mi ropa se ve “finita” –gracias a que la hija de un don señor tan importante como mi padre no puede parecer un vago– lo envidio, si yo le envidio al albañil, que seguramente al llegar a su casa a él, si lo esperan con una sonrisa, su esposa, sus hijos, su amante que se yo, tal vez hasta sus padres, ese wey se ve feliz de regresar a su casa después de un día de trabajo, a mi me da tanta tristeza que termine la jornada, que ya no me reconozco, si a mí ni me gustaba trabajar, pero más que envidiarle la vida el señor albañil, le agradezco no inmiscuirse en mi vida, le agradezco no pensar que soy una locadementepsicópatazorra por querer vivir sola, más cerca de mi trabajo; a él le importa un rábano si me gustan los hombres, y no está especulando mis preferencias sexuales gracias mi corte de cabello, el no creerá jamás que soy una mujer incompleta porque no sueño con una gran boda, o tener 4 hijos, a él no le molesta que huela a tabaco, y apuesto a que estaría más que complacido de invitarme un par de cervezas (me cae que pinche desconocido, le voy a decir que me haga un hijo, ok mejor no) pues sí, a mi desconocido, como a todos los demás habitantes del planeta tierra, le viene valiendo madres con quién diablos me voy a casar, o si voy a hacerlo, o si encuentro un “buen muchacho”, aunque tal vez él desconocido quisiera postularse al puesto, ¿ya les dije que soy muy buena conquistando cholos, albañiles y taxistas? ¿No les dije? Pues todos han comenzado sus propuestas matrimoniales con un: “señorita con todo respeto, ¿es usted casada? Si no para pedirle matrimonio en este momento” , bueno si pedirme matrimonio no está en su agenda, se mantendrá fuera de mi radar del odio y lo voy a amar por siempre y le agradeceré infinitamente: no presionarme, ni juzgarme, cuestionarme, acosarme, fastidiarme y sobre todo no estorbarme, lo “amaré” por vivir su vida y dejarme vivir la mía, por no meterse en lo que no le incumbe, ni criticar mi ropa, mis amigos, mi corte de cabello o la profundidad del escote de mi blusa, en fin por el millón de cosas que no hará, ni a favor ni en contra de los objetivos de mi vida, esta noche, mi trago de ron es a salud del desconocido, y de los muchos miles de weyes que no viven para estorbarme.
"Le agradeceré infinitamente: no presionarme, ni juzgarme, cuestionarme, acosarme, fastidiarme y sobre todo no estorbarme, lo “amaré” por vivir su vida y dejarme vivir la mía, por no meterse en lo que no le incumbe, ni criticar mi ropa, mis amigos, mi corte de cabello o la profundidad del escote de mi blusa, en fin por el millón de cosas que no hará, ni a favor ni en contra de los objetivos de mi vida, esta noche, mi trago de ron es a salud del desconocido, y de los muchos miles de weyes que no viven para estorbarme..." A esa parte me referìa loreto, me gustò por alguna loca razòn, sigue el camino de tu arcoiris!
ResponderEliminarcomo bien se dice... el que mas te ayuda es el que no te estorba
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